En un partido lleno de emociones, San Antonio logró una victoria agónica (3-2) frente a Olimpia en su debut en la Copa Libertadores. El equipo cochabambino mostró carácter y dejó una huella imborrable en el estadio Félix Capriles, con un penal decisivo en los minutos finales.
Desde el primer momento, San Antonio impuso su ritmo. Oswaldo, el incansable atacante colombiano, fue clave en la ofensiva, mientras que Carlos Suárez dirigió el mediocampo con precisión. Aunque Olimpia tuvo sus oportunidades, el arquero Rodrigo Saracho mantuvo su portería a salvo en momentos clave.
El primer gol llegó con un certero remate de Sebastián Viveros, pero el equipo paraguayo reaccionó y empató en el segundo tiempo con Hugo Benítez. La respuesta de San Antonio fue rápida: René Barbosa volvió a ponerlos arriba tras una revisión del VAR. Sin embargo, Olimpia no se rindió y Richard Ortiz igualó el marcador cerca del final.
Cuando todo apuntaba a un empate, un penal en el tiempo añadido cambió la historia. Julio Herrera, con sangre fría, convirtió el lanzamiento y desató la fiesta en las gradas. Con esta victoria, San Antonio no solo suma tres puntos, sino también confianza para su próximo desafío: visitar a Peñarol en Montevideo el 8 de abril.
El sueño libertador del equipo boliviano comienza con paso firme.
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