Finalizó el feriado de Carnaval, pasaron 24 horas y aún persisten las largas filas en surtidores del país en busca tanto de diésel como de gasolina.
La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), Ángela Burgos, dijo que las filas son consecuencia de la alta demanda por Carnavales, mientras la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, indicó que el costo del combustible de importación se duplicó con respecto a años anteriores, a lo que se suma que se está comprando mayores volúmenes debido a la caída de la producción en territorio nacional y además existen $us 1.600 millones bloqueados en el Legislativo por concepto de créditos externos.
La escasez de combustible en Bolivia se agrava, afectando a miles de productores, transportistas, empresarios y otros sectores. Uno de los puntos críticos de la crisis es la retención de cisternas debido a la falta de pago a proveedores.
El presidente de la Cámara Boliviana de Transporte (CBT), Héctor Mercado, informó que entre 700 y 1.000 cisternas están detenidas en Paraguay sin poder cargar combustible, mientras que otras 250 permanecen inmovilizadas en las instalaciones de YPFB en Santa Cruz.
“Este ya no es un problema de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) ni de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB). Es un problema económico del país. El ministro de Economía y el presidente deben dar soluciones reales porque los parches no funcionan”, afirmó
Por su parte el Comité pro Santa Cruz se pronunció al convocar hoy a una reunión de emergencia con representantes de las 15 provincias y sectores productivos para definir medidas de presión. Stello Cochamanidis, presidente del Comité, fue enfático al afirmar que Bolivia atraviesa un colapso económico, ya que la falta de combustibles y dólares pone en riesgo la cosecha de soya, que alcanza a 2,5 millones de toneladas. Según el cívico, este panorama podría desencadenar una crisis alimentaria.
El dirigente del transporte pesado, Juan Yujra, advirtió que desde la próxima semana retomarán las movilizaciones para exigir que se garantice el suministro de diésel. Domingo Ramos, otro representante del transporte pesado, advirtió que su sector está en estado de emergencia, ya que la falta de carburantes ha reducido su actividad económica a menos del 20% por lo que podrían irse a un paro nacional a mediados de marzo si no hay solución inmediata.
A su vez, el transporte urbano cruceño no está exento de las filas por combustibles y dio un plazo de 48 horas al Gobierno para resolver esta problemática, según el reporte del dirigente Bismark Daza, de la Federación de Transporte 16 de Noviembre.
En este sentido, el sector tendrá un ampliado este viernes en Santa Cruz con miras a evaluar la situación y no descarta asumir medidas de presión.
Por su parte, el sector productivo exige que se garantice el diésel, más en esta época de cosecha de verano. Así lo han hecho conocer en un pronunciamiento los representantes de la Federación de Ganaderos de Santa Cruz (Fegasacruz), la Cámara Oriental del Transporte y de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO). Desde el sector arrocero existe preocupación debido a que la cosecha del grano está en riesgo debido a un factor determinante: no hay diésel oportuno para encarar estas labores, lo que implica que puede no haber el suficiente arroz para la presente gestión y, por consiguiente, que no haya una regularización en los precios.
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