La Copa Libertadores asalta a la Champions en el Mundial de Clubes

Deporte | El País | 2025-06-20

El torneo del que solo se esperaba una Champions League también es una Copa Libertadores. A la resistencia que Sudamérica había mostrado contra la esperada superioridad europea en las primeras jornadas le siguió este jueves un inesperado asalto: el actual campeón de América, el mítico Botafogo de Garrincha, sorprendió 1-0 al reciente campeón de la Champions, el Paris Saint-Germain. Fue el primer triunfo de un equipo sudamericano sobre uno europeo en el Mundial de Clubes desde 2012, cuando el Corinthians venció 1-0 en la final al Chelsea.

El gol de Igor Jesús en Los Ángeles revolucionó especialmente al grupo B, el del Atlético de Madrid, vencedor 3-1 sobre Seattle Sounders en el turno previo. El equipo de Diego Simeone deberá vencer al Botafogo en la última fecha, el lunes, pero además descontar una diferencia de gol adversa para no quedar eliminado en la primera ronda. Si, como se supone, el PSG supera a los Sounders, el Atleti tendrá que superar por tres goles a los brasileños.

Los seis representantes sudamericanos, cuatro brasileños y dos argentinos, siguen invictos en su aventura en Estados Unidos. A primera hora del jueves, en Nueva Jersey, el Palmeiras venció 2-0 al Al Ahly de Egipto por el grupo A y aportó otro ladrillo al balance parcial de cinco triunfos y tres empates para los sudamericanos.

El Mundial de Clubes también tuvo su momento de Concachampions con el triunfo 2-1 del Inter de Lionel Messi sobre el Oporto, en Atlanta. Este viernes jugarán Flamengo-Chelsea por el grupo D y Boca Juniors-Bayern Múnich por el grupo C, dos partidos que hasta ahora parecían decorativos pero que visto los últimos resultados pasaron a ser de máxima atención para los europeos.

En el Rose Bowl de Los Ángeles, el Botafogo hizo un partido perfecto contra un PSG que, tras el 5-0 al Inter en la final de la Champions y el 4-0 contra el Atlético en el debut del Mundial de Clubes, salió al campo destensado y se topó con un rival que en cambio olió al partido de su vida. Los brasileños cortaron los circuitos alrededor de Vitinha y sólo sufrieron algún lujo aislado de Desideé Doué y Khvicha Kvaratskhelia, aunque inofensivos. Cuando Luis Enrique apostó a Fabián Ruiz y Nuno Mendes, en el segundo tiempo, Botafogo ya no le temía al campeón de Europa.