Bolivia sucumbe ante la potencia de Japón en un amistoso internacional

La Selección Nacional fue superada con claridad en Osaka con un marcador de 3-0, en un partido donde las diferencias tácticas y de ritmo fueron evidentes.

La Selección de Bolivia cerró su participación en esta fecha FIFA con una dura derrota por 3-0 frente a Japón, este martes en el Estadio Nagai de Osaka. El combinado dirigido por Antônio Carlos Zago no pudo contener el fútbol dinámico y vertiginoso de los asiáticos, que resolvieron el encuentro con eficacia.

Desde el pitazo inicial, Japón impuso su ritmo característico. La posesión rápida y los movimientos sin balón de los locales ahogaron a la Verde, que tuvo serias dificultades para salir de su propio campo. La presión rindió frutos para el equipo local al minuto 29, cuando tras una triangulación en el área pequeña, el delantero Mao Hosoya envió el balón al fondo de las redes para inaugurar el marcador.

La segunda parte no ofreció un guión distinto. Bolivia intentó reaccionar, pero le costó generar peligro claro en la portería rival. Cualquier atisbo de reacción se disipó en el minuto 65, cuando un remate desde fuera del área se coló en el ángulo para ampliar la ventaja japonesa. El tercer gol, llegado en el minuto 78, simplemente certificó la superioridad de Japón, que manejó los tiempos restantes sin complicaciones.

Análisis de un resultado elocuente

El 3-0 final refleja fielmente lo sucedido en el césped. Bolivia se vio superada en todos los aspectos del juego: intensidad, velocidad de circulación y precisión. Para el proceso de Zago, este partido deja lecciones claras sobre el nivel que se requiere para competir contra selecciones que, como Japón, han dado saltos cualitativos notables.

La derrota en suelo asiático sirve como un termómetro realista de la distancia que existe con las élites del fútbol mundial y se convierte en un punto de reflexión obligatorio de cara a los desafíos que se avecinan en las Eliminatorias.